El pasado 22 de agosto finalizaba en el Hotel
Salobreña Suites los Campeonatos de España de Jóvenes, una competición que
había creado mucha incertidumbre entre
los aficionados, padres y jugadores; ni estuvo exento de polémica al retomar las competiciones presenciales
después del confinamiento. Sus organizadores echaban toda la carne en el
asador para sacar adelante la novena edición consecutiva que se celebra en
Salobreña.
Un
estricto protocolo en todas las dependencias, cañones de ozono para desinfectar
la sala de juego después de cada ronda, uso de mascarilla, lavado de manos con
gel, servicio médico, toma de temperatura, reconocimiento previo a los
participantes; todo esto y mucho más para superar el miedo a caer enfermo y
quedar atrapado por cuarentena en el hotel.
Han participado 520
jugadores, cifra que el presidente de la Federación Española Francisco Javier
Ochoa de Echagüen calificaba de muy buenos teniendo en cuenta la situación que
vivimos; jugadores y familiares fueron más de un millar los que asistieron en
el hotel, lo que ha permitido salvar con un 85% la actividad estival según el
gerente Manuel Martín.
En el aspecto deportivo el
nivel de juego que ha podido verse a través de Internet ha sido excelente; con
un campeón mundial, otro europeo y numerosos titulados, a pesar de su edades.
Los nombres propios que son ya referencia de futuro en el ajedrez nacional
fueron entre otros el catalán Alex Villa, el navarro Javier Habans, el
asturiano Diego Vergara, el andaluz Alex
Garrido, la canaria Adhara Rodríguez, el aragonés Pedro Gines o la madrileña
Celia Guilló. Entre los motrileños la participación ha sido baja con respecto a
otras ediciones, destacar a Rosa Adela Lorente Serrano novena de España en el grupo de féminas en las
categorías infantil y juvenil, de los mejores ajedrecistas andaluces; junto
a Raúl González Vacas, Alejandro Valenzuela Fernández y Fernando Martín
Morales.
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