Nazarí
es un club de jóvenes amigos, básicamente universitario, que ha decidido
recorrer por sí mismo toda la escala de la competición por equipos. Uno no sabe
qué pensar, si debieran existir puertas excepcionales para casos excepcionales,
como alguna de Alicia en el País de las Maravillas… (Ya escucho las
protestas…).
Los
objetivos confesados por el Club Nazarí, nombre bonito y apropiado, son claros
y perfectos: pasarlo bien y alcanzar el máximo nivel en dicha competición. La
temporada pasada fue un espectáculo ver a estos maestros disputar la 2ª
división provincial de Granada, luchando con respeto contra modestos rivales y
modestísimos rivales. ¡Ascendieron! Y
digo ascendieron porque son dos equipos: Nazarí A y Nazarí B.
Este
año acaban de culminar la segunda etapa: quedar, respectivamente, campeón
(Nazarí “B”) y subcampeón (Nazarí “A”) provincial por equipos, lo que permitirá
que ambos disputen la fase de promoción de ascenso a la Primera División
andaluza, en representación de Granada. Tienen fuertes jugadores, encabezados
por su líder deportivo el GM Enrique Rodríguez, lo que hace muy probable que
consigan alcanzar su meta de promoción. Han cruzado como un águila el Campeonato
provincial, quizá para perderse definitivamente en la lejanía.
La
jornada de ayer, última y definitiva, tuvo una atmósfera extraña por varias
razones. Quiero poner énfasis en el esfuerzo del Club Ajedrez Motril. Al
comienzo de la jornada, 5ª ronda, tenía serias aspiraciones. Su sueño era
quedar campeón o, al menos, disputar la fase de ascenso. Para valorar bien las
cosas el lector debe tener en cuenta que este veterano club… ¡es de 2ª
categoría provincial! No hace mucho, bastantes de los jugadores “nazaríes”
jugaban en las filas motrileñas. ¿Saben en qué puesto ha quedado finalmente el
C.A. Motril? ¡En la séptima posición, casi en mitad de la tabla!
Es
extraño quedar tan derribados deportivamente, aparentemente por tan poco.
Adelanto que esto no es raro en las competiciones por equipos, especialmente a
pocos tableros (cuatro). Motril debió enfrentarse por la mañana a Nazarí B y
luego, por la tarde, a Nazarí A. Perdió con ambos por 2’5 a 1’5. Como suele
decirse, casi siempre inapropiadamente, aunque no en este caso: perdieron por la mínima. Las cortas seis rondas de este torneo les
llevó mucho más debajo de sus merecimientos. En la 5ª, el motrileño Andrés
Sánchez, revelación del torneo, concluyó en tablas una partida frente al
maestro FIDE Paolo Ladrón que estuvo muy cerca de ganar. Los maestros saben
resistir… Fue medio punto valiosísimo. En la 6ª la lucha fue magnífica entre
Nazarí A y el CAM. Larga y magnífica. Hay que destacar en el primer tablero la
lucha entre el GM Enríque Rodríguez (blancas) y el motrileño Jorge Fernández
Montoro. Durante un cierto tiempo dió la fuerte impresión (vuelvo a decir que
esto es típico de los encuentros por equipos) de que el encuentro se decantaba
a favor del club motrileño. Me atreveré a hacer algún comentario “técnico”:
Montoro jugó muy bien sus cartas en el final (buen espectáculo), al que llegó
con inferioridad, intentando compensar su pieza de menos con sus peones de más
y cierto ataque al rey rival. Tras diversas escaramuzas, Enrique Rodríguez
estableció rápidamente con sus piezas (dama, torre y alfil) un dispositivo de
ataque sobre el recinto del rey negro. Montoro no perdió la serenidad. Jugó
bien con sus peones y amenazó con eficiencia. Quizá su juego no fue perfecto en
todo el final pero sí suficiente, en la premura de tiempo de ambos, para forzar
al GM Enrique Rodríguez a buscar las tablas mediante la repetición de jugadas.
En el tablero dos, brillante victoria de Andrés Sánchez (Motril) frente a
Víctor García (Nazarí). En cambio, en los tableros tres y cuatro, la pelota
estuvo en el alero largo tiempo, cayendo finalmente del lado nazarí: Ismael
Urbano venció a un descentrado Manuel Martín, y el reaparecido Fernando Rueda
venció a Angel L. Castillo.
Como
ha quedado dicho, todos esos resultados finales desfondaron al club de Motril,
que ha visto como la tercera posición era ocupada por el Dama de Baza”A”, al
que ganó rotundamente por 4-0 en la ronda 4ª.
Claro que el equipo bastetano ha tenido una espléndida regularidad, perdiendo
sólo con Motril y empatando nada menos que con Nazarí B en la tercera ronda.
Por Guillermo BARRANCO
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